Yo recuerdo, cuando era pequeña y estaba en el colegio, que teníamos libro
incluso en plástica. Los contenidos que debíamos aprender estaban en el
libro correspondiente junto con sus actividades y las correspondientes tareas para casa.
Al necesitar tantos libros, la mitad de los nosotros no podíamos con las
mochilas. ¡Qué dolor de espalda!
Dejé el colegio hace ya algunos años, ahora estoy estudiando Magisterio en
Ciudad Real y me gustaría que algún día algunas de mis propuestas se pudieran llevar a cabo.
En mi opinión creo que se puede enseñar y aprender
sin ningún libro. Esta afirmación puede ser muy conflictiva por lo
que me explicaré mejor.
Pienso que los libros deben estar en clase pero como material de consulta, no como instrumento necesario e imprescindible para el aprendizaje. Uno de los
elementos que nos pueden servir para llevar a cabo mi planteamiento son las
imágenes proyectadas. Eso es, mi nuevo reto es poder enseñar y de que mi alumnado asimile la materia a partir de imágenes. Éstas, como material didáctico, en algunas situaciones se han obviado, a pesar de que es muy
interesante e ilustrativo.
Hoy en día contamos con proyectores, cañones y en algunos casos con
pizarras digitales, es decir, TICS, en las cuales podemos proyectar todo tipo de material educativo.
Este nuevo pensamiento tiene varias ventajas, entre ellas:
- Nuestros alumnos-as no llevan tantísimo peso en la mochila, que en ocasiones origina problemas de espalda.
- Resulta mucho más interesante ya que dichas imágenes captarán la atención del alumnado por más tiempo en los contenidos que estemos tratando.
- Se fomenta el aprendizaje por descubrimiento.
- Es un aprendizaje muy ameno, dando lugar a la imaginación y creatividad.
El proyecto
de las imágenes proyectadas es bastante innovador. Como he comentado en otras entradas,
en las escuelas contamos con niños-as del siglo XXI. No podemos seguir con
la misma metodología de nuestros antiguos profesores, por lo que nuestra obligación es ofrecer a nuestro alumnado aquel material que les permita adquirir conocimientos y experiencias por ellos mismos de forma cómoda, atractiva y lúdica.
No debemos olvidar que vivimos en una sociedad en el que las imágenes forman parte de nuestra vida e incluso de nuestro alfabeto. Por suerte las nuevas
tecnologías nos ofrecen muchas posibilidades y facilidades para llevar a cabo todo
aquello que nos planteemos.
Integrémonos en la nueva sociedad, con el objetivo de que nuestro
alumnado, la generación del futuro se forme de acuerdo a las necesidades del
momento y por ellos mismos.
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